Prensa UP_ La senadora Aída Avella responde a los señalamientos de Álvaro Uribe contra la Unión Patriótica.
La Unión Patriótica debe rechazar la carta y los términos en que está escrita, enviada por el doctor Álvaro Uribe Vélez y leída por un señor de apellido Valle durante el sepelio de Miguel Uribe Turbay. Nosotros rechazamos cualquier muerte violenta en Colombia y en el mundo, y creemos que nadie puede morir de esa forma bajo ninguna circunstancia. Sin embargo, es necesario hacer algunas precisiones a quien escribió esa carta.
En primer lugar, los términos en que se refiere al presidente Petro son inaceptables. No tiene derecho a hacerlo una persona que ocupó por dos periodos la Presidencia de la República, el segundo de ellos muy cuestionado, pues todavía está en investigación el hecho de que algunos parlamentarios vendieron su voto para propiciar su reelección.
En segundo lugar, todas las afirmaciones que ha hecho el señor Uribe contra la Unión Patriótica carecen de sustento. La realidad histórica y la realidad jurídica se imponen no solo en algunos Estados nacionales, sino también en los estrados internacionales. Nuestro proceso marca un punto especial en la historia, no solamente jurídica, sino también política del continente americano. Aquí sucedieron hechos peores que los cometidos por las dictaduras del Cono Sur, y ocurrieron en medio de gobiernos supuestamente democráticos.
Debo recordar algunas cifras, porque también dicen mucho. En el periodo de la Gobernación de Antioquia, entre 1995 y 1997, fueron asesinados 483 de nuestros militantes en ese departamento, lo que representa el 60% de quienes murieron en esa misma región del país, causando un dolor inmenso a miles de familias victimizadas.
Durante los dos periodos presidenciales de Uribe Vélez, entre 2002 y 2010, la violencia contra nosotros fue aún más grave: se registraron 2.672 víctimas, entre ellas 139 personas desaparecidas cuyo paradero aún desconocemos, y el asesinato de 1.076 militantes de nuestro movimiento. Las cifras hablan por sí solas.
¿Quién fue el responsable? Todavía está en investigación quiénes dieron las órdenes para matar a nuestra gente. Sin embargo, en instancias internacionales ya existen fallos que señalan a quienes estuvieron detrás: muchos agentes del Estado, en connivencia con narcotraficantes, terratenientes y, dolorosamente, algunas personas que trabajaban en la fuerza pública.
Por todo ello, rechazamos en todos sus términos su carta: una carta que divide a los sobrevivientes, que intenta desconocer una realidad y negar un hecho histórico que no se puede tapar con las manos. La verdad es otra, y las víctimas y sobrevivientes tenemos aún mucho que decir. Llamamos a abandonar esos discursos de odio, de guerra, de negacionismo, que solo buscan que regrese la violencia del pasado. Lamentamos lo ocurrido en Colombia, condenamos los crímenes contra personas desmovilizadas, campesinos, líderes sociales, presidentes de juntas de acción comunal y, por supuesto, también condenamos el asesinato de Miguel Uribe, que es uno más entre miles de ciudadanos acribillados en este país.
Aída Avella – Senadora Pacto Histórico
15Agosto 2025