La suspensión del Centro Nacional de Memoria de la Coalición Internacional de Sitios de Conciencia,  representa una vergüenza más para el Estado Colombiano en el ámbito internacional y en el movimiento mundial a favor de la paz y los derechos humanos.

No es ninguna equivocación involuntaria, es la consecuencia lógica de la política de negacionismo del conflicto armado interno e incumplimiento del acuerdo de paz, que abierta o soterradamente ejerce el Partido de Gobierno, a través de varios de sus funcionarios e instituciones, entre ellos, el muy cuestionado director del Centro de Memoria, Darío Acevedo.

Otro hecho igualmente grave que rechazamos es el nombramiento de Fabio Bernal Carvajal, funcionario claramente articulado a las Fuerzas Armadas, como director del Museo Nacional de la Memoria.

Por estos y otros actos de desconocimiento de los derechos de las víctimas, censuras y abierta parcialidad ideológica, exigimos la renuncia de estos funcionarios de las direcciones de tan importantes instituciones, y la garantía de nuevos directivos respetuosos de los compromisos del Estado con la verdad, la paz y la reconciliación.

Bogotá, febrero 5 de 2020.